En nuestra sesión de ocio semanal, hoy traigo un museo, y más concretamente
El parque de las ciencias
Para los que me leéis desde Córdoba (o cualquier otro sitio que no sea Granada) quizás os pille un poco a contramano, pero es una visita, creo que obligada, después de la Alhambra.
Como museo está muy bien, pero no destaca por tener una amplia colección de cosas realmente únicas o valiosas (que las tiene) si no por como están presentadas. Todo lo que hay se puede tocas, ver, sentir.
Yo creo que he debido de ir unas 4 ó 5 veces, y realmente no me canso de ir, ya que cada vez que voy descubro una cosa nueva, o disfruto con una exposición temporal mejor que la anterior.
Cuando lo inauguraron era tan sólo un pequeño edificio con unos jardines traseros, y ya ha crecido tanto que ese pequeño edificio es la parte trasera del mismo, contruyendo otro módulo, mucho más grande en la parte delantera del mismo.
Por tener tiene de todo, y cuando digo todo es todo, y realmente da lo mismo la parte de la ciencia que te guste, que seguro que allí está representada.
La visita se puede hacer todo lo larga que queráis, ya que, por ejemplo, la ultima vez que estuve (en verano con mi novia) pude estar al menos 5 horas y se que dejé cosas sin ver.
Una recomendación es entrar por ese edificio antiguo y explorarlo entero, para después pasar al resto, que es mucho mejor. La razón es que si lo haces al revés, entrando por la entrada espetacular, luego, el origen de todo te puede parecer frío y soso.
Por otro lado, también recomiendo subir a lo alto de la torre de observación, ya que las vistas de la ciudad de Granada desde allí no tienen precio.
Por si queréis visitarlo virtualmente o en persona, os dejo el link del Parque de las ciencias.
La pena, para mi, es no vivir allí, o aún mejor, que no pongan en Córdoba uno
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