De vuelta del Mecado Medieval de Córdoba 2013

Imagen obtenida de "eldiadecordoba.es"

Pues sí, queridos lectores, ayer estuve en el mercado medieval de Córdoba.

La verdad es que, a quien fuese otros años, no le sorprende lo que hay. Este año se extiende por la plaza de la Corredera, plaza de las Cañas y plaza del Potro, siendo esta última un mercado árabe (al menos eso ponía en uno de los carteles).

Lo que sí había este año eran millones de personas viéndolo  Increíble, no he visto tanta gente junta en un mismo sitio nunca. En determinadas esquinas no podías andar, sólo podías dejarte llevar por la masa de personas que se movían, cual río salvaje. Si en ese momento hubiesen llegado los marcianos a abducirnos, de una sola vez habrían acabado con la población de media España.

El truco para moverse, utilizado con alguna alegría, consistía en preguntarle al de al lado, en un tono elevado, si se había curado de sus piojos, o proclamar que tenias que volver a echarte anti-piojos  que te seguía picando la cabeza. Oye, infalible, rápidamente se hacía un pequeño hueco.

¿Qué hice en el mercado? Pues aparte de ver todos los puestos, me comí un perrypan (vamos, un perrito caliente), probé un poco de vino caliente. compré unos barquillos de chocolate y, los amigos que me acompañaban se comieron un crêp.

La verdad es que los precios, pese a ser tan caros como siempre, este año se han moderado un poco, y yo creo que puedo decir que no han subido con respecto al año pasado.

Lamentablemente de los espectáculos apenas puedo hablar, ya que, pese a que vi alguno, la masa de gente me impidió disfrutar de ellos como Dios manda. Vi una marioneta gigante de un dragón (que estaba muy lograda), varias bandas de música, unos saltimbanquis, otros zancudos, y desde lejos pude ver a un tragafuegos.

En resumen puedo decir, que debido a la gente que había, el mercado del año 2013 merece la pena.